Berenjenas rellenas de lentejas

Las berenjenas rellenas es un plato que en casa de mis padres siempre se ha hecho muchísimo y que siempre me ha gustado, pero siempre era la misma receta, con carne y cebolla (que estaba riquísimo, todo sea dicho), pero me apetecía explorar otras combinaciones. Así que esta vez, he hecho berenjena rellena de lentejas con verduras, y me ha encantado.

La berenjena rellena es un plato super agradecido, ya que es fácil de hacer, y se puede congelar y así tener comida de tupper para otro día. Los ingredientes, son para dos personas. Hay varias cocciones a la vez, así que lee primero la receta para saber qué pasos puedes hacer de forma simultánea.

Ingredientes:

-2 berenjenas

-150gr de lenteja roja*

-1 cebolla

-1/2 pimiento verde

-1 tomate

-2 dientes de ajo

-queso vegano para gratinar

-un puñadito de almendras crudas

-aceite

-vino blanco

-sal

-azúcar

-laurel

-ramitas de tomillo

-pimienta

-pimentón dulce

-pimiento de espelete (o pimentón picante)

*Yo utilizo lenteja roja porque la lenteja típica no me ha gustado nunca, y me he dado cuenta que es por la textura. La lenteja roja no tiene piel y por tanto no se le queda esa textura terrosa que sí tienen las otras lentejas, además de que no hace falta tenerla en remojo y se cocina en 15 minutos. El peso que digo es de la lenteja sin cocer, pero podéis utilizar la lenteja que más os guste.

Pasos:

1- Lo primero que vamos a hacer es cortar la berenjena por la mitad a lo largo, de forma que nos queden dos partes lo más similares posibles. Echamos sal por toda la parte carnosa, y las dejamos reposar durante 30 minutos sobre un colador o rejilla. Mientras, precalentamos el horno a 200ºC.

2- Transcurrido el tiempo, secamos el agua que ha soltado, y les hacemos muescas a las berenjenas para que se cocinen mejor y antes (yo hago varios cortes a lo largo y luego en una diagonal, haciendo forma de diamante) con cuidado de no cortar la piel (no hace falta hacer mucha presión, la propia berenjena nos dirá hasta donde cortar). Ponemos un poco de aceite, y al horno una media hora (este tiempo puede variar dependiendo del tamaño de la berenjena, siempre podemos dejarlas un poco más).

3- Ponemos en un cazo agua a hervir con un poco de sal, un par de hojas de laurel, la ramita de tomillo y un diente de ajo. Cuando rompa a hervir, ponemos las lentejas y las cocemos durante 15 minutos removiendo de vez en cuando. Transcurrido el tiempo, colamos y reservamos.

4- En una sartén pequeña echamos el tomate troceado bastamente con aceite, sal y azúcar. Cuando empieza a soltar el agua, echamos un chorrito de vino blanco y algo de pimienta, y dejamos cocinar y espesar. Después, pasamos por una batidora y reservamos.

5- Mientras, picamos la cebolla, el ajo y el pimiento con un corte fino. En una sartén con aceite, echamos la cebolla y el ajo con sal, y dejamos que se poche. Cuando empieza a estar transparente, ponemos el pimiento y cocinamos.

6- Cuando la berenjena está lista, la sacamos del horno, y con cuidado de no quemarnos y con ayuda de una cuchara, vamos sacando la carne de la berenjena. No tiene porqué quedar la piel totalmente limpia, solo tenemos que vaciar la mayor parte de la carne. Si algo no está del todo cocinado, no pasa nada: la carne la vamos a echar a la sartén, y la piel con lo que queda de la carne la podemos poner al horno unos minutitos con calor residual para que se acabe de hacer.

7- Picamos la berenjena que hemos sacado de la piel y la echamos a la sartén junto al resto de la verdura. Cuando está todo bien mezclado, añadimos el tomate y especiamos con la pimienta, el pimentón y el pimiento de espelete. Después echamos las lentejas y mezclamos bien. Corregimos de sal y especias.

8- Cuando los sabores están integrados, rellenamos las pieles de berenjena con la mezcla, debería sobresalir un poco de la piel. Ponemos un poco de queso rallado por encima.

9- Y esta es mi parte favorita de la receta, ya que es lo que acaba de redondear el plato. Picamos las almendras crudas, de forma que se queden a trocitos, como una arena gruesa (puede ser a mano o con una picadura), y lo echamos por encima, junto al queso. Y es que le va a dar una textura crujiente maravillosa.

10- Lo ponemos otra vez al horno unos minutitos para que gratine.

 

¡Y listo! Ya tenemos lista nuestras berenjenas veganas. Me encanta esta receta, y el truquito de la almendra en el gratinado es algo que voy a incorporar en más recetas. Espero que os guste tanto como a mi.